Una manera diferente de comer pollo es con esta receta tan sabrosa, con la cual sorprenderá a todos que la prueben. Además de ser muy fácil de realizar.
Ingredientes (4p):
- 4 pechugas de pollo
- 4 rebanadas de jamón cocido
- 8 rebanadas de mozzarella
- Huevo
- Leche
- Pan rallado
- 4 papas medianas (opcional guarnición)
- Mantequilla (opcional guarnición)
- Aceite
- Sal
Salsa:
Elaboración:
Pelar los tomates eliminando las pepitas, cortar en cuadros pequeños. Reservar.
Pelar los dientes de ajo, machacar o picar muy pequeños. Lavar y picar el perejil. Pelar, lavar la cebolla y cortar en cuadros pequeños.
Poner aceite en una sartén y dorar los ajos, añadir la cebolla y dejar cocinar a fuego medio bajo hasta que la cebolla esté transparente.
Luego incorpora el tomate picado, salar (si es ácido, añadir un par de cucharaditas de azúcar), añadir el orégano, revolver y dejar cocinar por 20 minutos o hasta que la textura quede espesa.
Luego incorporar la mitad del perejil picado, revolver y dejar reposar.
Para una salsa fina, pasar por el pasapurés si lo desean.
Coger las pechugas y abrir por la mitad, como si fueran un libro, sin separarlas en filetes.
Cubrir con film transparente y aplastar hasta que queden bien finas. Luego sacar del film transparente.
Batir el huevo, añadir un poquito de leche y sal. Batir bien.
Rebozar las pechugas, pasar primero por huevo y luego por pan rallado.
Freír en abundante aceite caliente. Cuando estén listas poner sobre papel absorbente para sacar el exceso de aceite.
Colocar las pechugas en una bandeja para horno. Sobre cada pechuga colocar una rebanada de jamón cocido, y encima dos de mozzarella por pechuga.
Gratinar en el horno.
Una vez gratinadas emplatar, regar por encima la salsa napolitana caliente y el perejil que se había reservado.
Acompañar de vegetales a su gusto.
